Álvaro Álvarez es ejemplo de artista vocacional que vence todas las adversidades y logra, con esfuerzo y dedicación, buscarse un hueco en el difícil mundo artístico.
Nace el 11 de octubre de 1969 en Pola de Siero y será en Asturias donde realice sus estudios de formación de la mano de escultores como José Llonguera y Mauro Álvarez.
Teniendo como soporte habitual la madera, la obra de Álvaro Álvarez abarca tanto la figuración como la abstracción.